El verano para los pequeños puede ser aburrido o muy entretenido y eso depende de como te lo montes. Muchos padres no pueden permitirse construir una piscina ya sea por falta de espacio como por falta de dinero. En cualquier caso, una piscina de plástico puede ser la mejor opción para entretener y refrescar a los más pequeños de la casa y darles un verano divertido. Pero las piscinas de plástico tienen sus ventajas y sus inconvenientes.
Antes de que adquieras una piscina de plástico debes saber que esta deberás colocarla sobre una superficie lisa y preparada. Un suelo bien nivelado y cubierto con un tapiz de suelo para que los objetos punzantes que provienen de la tierra no pinchen la piscina (ramas, piedras, etc). Por otra parte, limpiar la piscina de plástico es mucho más sencillo que limpiar una piscina normal. Nuestro consejo es que, al igual que las piscinas construidas, cubras la piscina de plástico durante las temporadas en las que no se utiliza la piscina (invierno y primavera) e incluso durante la noche, cuando no te estás bañando.
Nuestra recomendación es que recojas las hojas e impurezas que caigan pero también que la limpies con un cepillo. Sin embargo, para hacer esta tarea más sencilla puedes ir manteniendo el agua de la piscina limpia durante las épocas de baño. Con cloro, sal, oxígeno activo y manteniendo los niveles de los químicos y del pH bajo control siempre. Como podemos ver, la limpieza y el mantenimiento es muy similar, solo que un poco más sencillo y menos aparatoso.
Factores externos
Siempre hay factores externos que pueden estropearlas, pese que las piscinas de plástico estén hechas de un plástico que suele ser resistente y no se rompe con facilidad. Por ejemplo, un pinchazo de algún insecto o un golpe. Pero si no queréis adquirir una piscina nueva, estas piscinas es posible repararlas. Si esto ocurre, lo primero que deberás hacer es vaciar la piscina por completo, llevarla a un sitio plano donde puedas moverte cómodamente y ponerte manos a la obra para repararla.
Pero además de vaciar la piscina también deberás dejarla secar ya que una piscina mojada puede traer problemas en la reparación. Déjala secar al aire libre y después ya puedes reparar el agujero. Pero antes de vaciarla y secarla, marca con rotulador el agujero que se ha hecho en la piscina y que hace que se pierda agua. Una vez vacía y seca, con ayuda de un kit de reparación de superficies de plástico, cubre el agujero con un plástico adherente que mida lo mismo. Es como cubrir el agujero con un parche.