La desinfección cobra actualmente una gran importancia en nuestra sociedad. La Neolysis es un sistema de desinfección que combina la electrólisis y la luz ultravioleta. Pero ¿este sistema de desinfección funciona eficazmente, o no?
El agua de cualquier piscina (ya sea pública o privada) debe tener un buen sistema de filtración y desinfección para garantizar la limpieza máxima y la salubridad del agua. Un buen tratamiento bacteriológico para el agua garantiza que las bacterias y microorganismos sean inexistentes en el agua de la piscina. Todos estos microorganismos se deben eliminar de forma correcta para evitar el riesgo de contaminación, contagios y también impedir que las algas crezcan libremente y den un aspecto desagradable a nuestra piscina.
¿Qué es la Neolysis?
La Neolysis es un novedoso sistema que ofrece una gran desinfección y calidad del agua y el ambiente con un uso reducido de cloraminas y sal. Es una nueva tecnología que supone una de las mejores soluciones de desinfección y tratamiento que combina la luz ultravioleta y la electrólisis de baja salinidad. Por separado, estas soluciones de tratamiento no tienen tanta fuerza y efectividad como cuando las utilizamos en conjunto. Utilizados en conjunto, estos dos sistemas corrigen mutuamente sus limitaciones y nos ofrecen una desinfección muy efectiva.
Hay una gran variedad de sistemas de tratamientos del agua, pero uno de los más novedosos y ventajosos es la Neolysis. Pero este sistema de desinfección destaca por su uso mínimo de sal a la hora de tratar el agua. La técnica desinfectante consiste en la luz ultravioleta (con una intensidad media o baja) y la electrólisis con muy poca sal (menos de dos gramos por litro). Es decir, se utiliza muy poca cantidad de estos dos elementos, que en conjunto suponen una desinfección de gran eficiencia y como resultado, un agua de muy alta calidad.
Ventajas de la Neolysis
La ventaja principal de este sistema de desinfección es que se reducen al máximo las cloraminas por el uso mínimo de cloro. La cloramina es un “veneno” que oculta el agua de la piscina y que, al respirarlo en exceso puede provocar problemas de salud como el asma y otras infecciones respiratorias. La cloramina también es responsable del olor a desinfectante. La cloramina aparece cuando el cloro entra en contacto con substancias como la saliva, el sudor, la orina, cosméticos y otros elementos.
La Neolysis es recomendable sobre todo en piscinas cubiertas, ya que en estas es donde la cloramina afecta en mayor cantidad a la respiración y la salud. Esto se debe a que la temperatura del agua es mayor y la ventilación es inferior. Además, es altamente recomendable una desinfección por Neolysis en piscinas que utilizan las personas que tienen alergias respiratorias y también es aconsejable si la piscina dispone de personal que está en contacto continuo con la piscina (socorristas, monitores, cuidadores, etc.).
En conclusión, esta doble desinfección que conseguimos gracias a la luz ultravioleta y la electrólisis es quizás una de las mejores formas de conseguir un agua de alta calidad y a la vez hacer uso de una tecnología sostenible, que reduce el gasto de químicos.