A la hora de iluminar la piscina surgen algunas dudas, sobre todo si es la primera vez que intentamos darle luz a una piscina. Un buen baño nocturno puede resultar muy relajante si contamos con la iluminación correcta. Una iluminación buena también es ideal para crear ambientes para distintos momentos de ocio (fiestas, cenas, reuniones, etc.). En este post te daremos una guía básica para que le des luz a tu piscina de la mejor manera.
Normalmente para diseñar un sistema de iluminación para la piscina necesitaremos contar con las medidas de la misma (tanto del perímetro de la piscina como la profundidad de la misma). Como regla general necesitaremos un foco para cada 20m2 de superficie de agua de la piscina que queramos iluminar. Si por ejemplo tenemos una piscina con simplemente 5mx4m, solamente necesitaremos un foco.
Para determinar la altura a la que colocaremos los focos debemos calcular alrededor de 70 cm desde la superficie de la piscina. Esta distancia es perfecta para facilitar el mantenimiento de las luces y las reparaciones que puedan surgir. Si colocamos los focos a esta distancia podremos acceder a ellos desde el exterior de la piscina, sin necesidad de meternos dentro para realizar reparaciones o sustituciones.
Consejos de iluminación para piscinas
La ubicación de los focos se establecerá según los ambientes que queramos crear y los efectos visuales que queremos darle a la piscina. No hay una forma perfecta o universal de colocar los focos, ya que esto depende del aspecto que queramos conseguir o la función que tendrán los focos. Si por ejemplo la piscina está cerca de la casa, la mejor forma de colocar los focos es orientándolos en posición contraria a la casa, con el fin de que no nos deslumbre mientras estamos dentro.
Si por ejemplo tenemos escaleras en nuestra piscina, será muy buena idea colocar los focos en el lado opuesto de las escaleras, de tal forma que las escaleras queden perfectamente iluminadas. Si la piscina que queremos iluminar está destinada a la natación, la mejor idea será colocar las luces en los laterales de la piscina. Así iluminamos la piscina por completo y evitamos deslumbrar a los nadadores.
En cuanto a los tipos de focos, podemos encontrar los de halógeno y LED, los que están empotrados a la pared, los extraplanos que se colocan en la superficie de las paredes de la piscina, los de Liner y los de hormigón.