Llega el verano y si no tienes piscina, seguramente te hayas planteado tener una en tu casa. En muchas ocasiones nos gustaría tener una piscina, pero no disponemos del lugar suficiente en el jardín e incluso no disponemos de jardín. ¿Podemos en este caso conseguir una piscina para nuestro hogar? La respuesta te encantará, así que, sigue leyendo este post.
Actualmente hay una gran variedad de tipos de piscinas, materiales, tamaños y modalidades que pueden ajustarse a cualquier necesidad que tengamos. Normalmente, si preguntas a cualquier empresa que venda un tipo de piscina en concreto te dirá que su piscina es la perfecta y adecuada para ti, que su producto es mucho mejor que el de la tienda de enfrente. Sin embargo, no cualquier piscina vale para cualquier espacio. La piscina de obra, es decir, de hormigón, son las piscinas de toda la vida, pero puedes contar con dos tipos de construcción: gunitado o encofrado.
Piscinas de obra
La ventaja de las piscinas de obra es que duran mucho, pueden ser fácilmente personalizables y proporcionan un tacto y unos acabados mucho más agradables. Requieren de un tiempo mayor para la construcción y puede haber riesgo de que se haya construido mal si no cuentas con los profesionales adecuados. El gresite puede estropearse debido al paso del tiempo si no realizamos un buen mantenimiento periódico en nuestra piscina.
Piscinas de acero
Las piscinas de acero son toda una revolución de la que pocas personas han escuchado hablar. Su tacto es diferente, de polivinilo, no de gresite. Lo bueno es que la piscina de acero no se estropea debido a los movimientos de la tierra, no hay fugas, pueden ser personalizables y suelen ser más baratas que las de obra. Las desventajas son entre otras, que el sol y los químicos pueden decolorar el liner a lo largo de los años. Otra desventaja es que suelen ser más frágiles que las piscinas de obra por cuestiones evidentes.
Piscinas de Poliéster
Las piscinas de poliester son muy fáciles de reparar y muy rápidas de instalar, además de ser más baratas. Lo negativo es que se pueden decolorar con más rapidez y no podremos pintarlas para mejorar su color en absoluto. Si lo que quieres es una piscina realmente resistente que sobreviva al paso de mucho tiempo, las piscinas de poliéster no son la mejor elección.