El elemento protagonista de la piscina siempre es el motor o la bomba de la piscina. Estos elementos son esenciales en una piscina, ya que sin ellos el agua no sería apta para bañarnos de forma segura. Estos elementos son diferentes: la bomba funciona mediante energía hidráulica mientras el motor convierte la electricidad en energía mecánica. Teniendo esto en cuenta, es importante mencionar que la bomba funciona con la ayuda del motor. Es muy importante conocer cuáles son las averías más comunes de las bombas de la depuradora y cómo podemos solucionarlo.
Bombas para piscinas
Hay una gran variedad de bombas de depuradora para la piscina. Podemos clasificarlas principalmente por el material del que están hechas. Encontraremos bombas de agua de plástico, de hierro o de bronce.
En cuanto a la potencia, las bombas de agua pueden ser desde 0,25 CV hasta más de 15 CV. También podemos clasificar las bombas de la depuradora entre centrifugas o autoaspirantes. En cuanto a la tecnología, las bombas de depuradora pueden tener distintas funcionalidades, como una frecuencia con variadores, cuadros eléctricos incorporados y mucho más.
La bomba de agua es un elemento fundamental en la depuración y además es un dispositivo que está en funcionamiento la mayor parte del tiempo en verano. Por este motivo es muy importante detectar cualquier problema en la depuradora a tiempo, para que un pequeño problema técnico no se convierta en una avería irreparable, que nos obligue a cambiar la bomba. La avería más habitual en las bombas de agua es el desgaste de los rodamientos. Para detectar esta avería podremos escuchar un ruido metálico, ya que los rodamientos están desgastados.
Soluciones y consejos para el mantenimiento del motor de piscina
El cierre metálico también se desgasta y cuando esto ocurre la bomba puede estropearse, ya que funcionara en vacío. En ocasiones la turbina se obstruye o desgasta entonces la bomba deja de filtrar bien. En este caso bastará con desmontar la bomba y eliminar la suciedad de la turbina. El motor también puede estropearse, sobre todo cuando dejamos de utilizarlo durante los meses de frío. Entonces el motor se engarrota, pero la solución es simple, solo debemos mover el eje y ayudarlo a arrancar.
Una avería también muy común en los motores es cuando estos se inundan. En este caso tendremos que llevar el motor al taller para repararlo y secarlo. Otro caso de avería muy habitual es el condensador de arranque. Si este se estropea, lo más probable es que tengamos que cambiarlo por otro. El bobinador puede sobrecalentarse si funciona de forma demasiado exhaustiva.