Durante el otoño el aire es un poco más frío y las hojas están cambiando de color. Uno de los temas de conversación más frecuentes es “cada vez se hace de noche más temprano” lo que significa que el otoño ya está con nosotros.
Con la caída de las temperaturas, es posible que te preguntes: ¿Cómo puedo seguir disfrutando de mi piscina y de mi spa al aire libre? Las fiestas en la piscina durante el verano pueden llevarse toda la gloria, ¡pero también hay muchas maneras de disfrutar de tu piscina durante el otoño!
Las temperaturas más frías no tienen que detener la diversión
No hay mejor manera de entrar en calor que haciendo unos largos o nadando tranquilamente en una piscina climatizada. Si en tu caso tienes una piscina de obra que no sea climatizada no tienes motivo para no utilizarla si aguantas estas temperaturas. El agua fría es ideal para determinados casos que te exponemos a continuación.
Disfruta de tu piscina durante el otoño
Zambullirse en agua fría puede suponer soportar un gran impacto de manera inicial, sin embargo, los beneficios del agua fría son numerosísimos para nuestro cuerpo y nuestra salud.
El agua fría ayuda a mejorar nuestra circulación. Nuestra salud cardiovascular es muy importante. Cada vez más conforme cumplimos más años por el paso del tiempo. ¿Cómo es posible que el agua fría mejore nuestra circulación? Debido a entrar en contacto con el agua fría, experimentamos un aumento en la presión y nuestro ritmo cardíaco se ve acelerado. Esto propicia que nuestros vasos sanguíneos se contraigan, lo que favorece nuestra circulación.
Los contrastes son evidentes, pero se pueden sobrellevar con buenas prácticas. Alternar el agua fría con el agua caliente, apoyará los beneficios de sumergirnos en agua fría. Esto también nos ayudará en los momentos en los que nos encontremos con fiebre, llegan a bajar nuestra temperatura corporal sin que suponga un riesgo para la salud.
El agua fría también es altamente efectiva para los momentos en los que la apatía nos invada. Es capaz de despertar nuestra mente y activar nuestro estado físico gracias a la reacción que provoca en nuestro cuerpo. Además, mantener activo nuestro físico y nuestra mente nos ayudará a mejorar nuestro estado de ánimo en los momentos en los que nos sintamos con menos fuerza moral. El agua fría no solo nos ayuda a nivel físico, también a nivel mental.