Prepararse a la temporada de frio conlleva mucho trabajo en muchos aspectos. Uno de ellos es hacer uso de la característica particular de tu piscina desmontable, ya que puede llegar a ser un trabajo complicado. Para comenzar, lo primero que hay que hacer es vaciar el agua de la piscina y guardarla para que se mantenga en buenas condiciones y no se deteriore con el tiempo.
Hay casos en los que es mejor vaciarla y desmontarla y casos en los que es mejor cubrirla sin más. Esto depende en primer lugar de la temperatura que hay en la región donde vives. Si no se da el caso de una temperatura radical no se congelará el agua por lo que la piscina no se dañará. En este caso podrás permitirte dejar la piscina montada y cubierta. Sin embargo esto conlleva otros cuidados que pueden tomar más tiempo y trabajo que simplemente desmontarla.
El paso a paso para desmontar tu piscina
No obstante, para desmontar la piscina debes seguir las instrucciones del fabricante ya que hay que tener en cuenta el material y las piezas de las que está hecha. Un consejo que te damos es que durante el proceso de desmontar la piscina tomes unas cuantas fotos como guía para el siguiente año para que de esta manera te sea más fácil repetir el proceso.
Para que la piscina se mantenga a lo largo de los años hay que proveerle una buena limpieza y mantenimiento. Asegúrate de que las piezas queden limpias para evitar que la suciedad y los restos de los químicos se acumulen. Después hay que asegurarse de guardar las piezas completamente secas y reparar o sustituir aquellas que estén rotas.
Los accesorios son igual de importantes como la piscina. Estos elementos también se deben desmontar y guardar. Nos referimos a los limpiafondos, la depuradora, etc. Estos también deben limpiarse, secarse y guardarse adecuadamente para evitar el desgaste. Esto es muy importante para un buen almacenamiento, ahorro y calidad ya que estas piezas que pueden resultar costosas si nos se cuidan bien.
Después de desmontar la piscina hay que guardarla en un lugar adecuado, ya sea en su caja original o en otro sitio, pero hay que asegurarse de que las piezas no están expuestas al aire libre y se queden bien cerradas y lejos de la humedad, insectos y polvo. Otra recomendación es que después de desmontar la piscina también hay que darle algunos cuidados al jardín ya que el terreno cambia y se resiente.