El cobertor de invierno de su piscina la mantiene protegida del viento, los animales, la lluvia y de todo tipo de amenazas durante varios meses. Siempre debe cubrir su piscina con el cobertor de invierno si no va a nadar en ella. Pero una duda muy común en este sector es: si la cubierta está protegida por el cobertor, ¿cómo se protege el cobertor?
Hoy en Piscinas Lara, analizaremos cómo se protege el cobertor de piscina frente a los cuatro peligros más comunes: el hielo, el viento, los árboles y los animales.
Protección contra el hielo
Si reside en una zona en la que el hielo amenaza su cobertor durante el invierno, deje que el hielo se derrita para que pueda retirarlo a posteriori. Nunca intente eliminar el hielo congelado porque puede tener bordes afilados (y es bien sabido que a los bordes afilados no son nada recomendables para un cobertor de piscina).
En cuanto a cómo evitar que se forme hielo en primer lugar, puede intentarlo manteniendo un nivel de agua de uno o dos milímetros de grosor en la parte superior de la cubierta, cuyo objetivo será evitar que se formen grandes acumulaciones de hielo.
Protección contra el viento
Para proteger su cubierta contra el viento, mantener esos dos milímetros de agua en la parte superior de la cubierta también funciona a la perfección como “aislante”. No obstante, si su cobertor de invierno es de lona lo mejor que puede hacer es colocar una bolsa de agua en el medio del cobertor para que se mantenga bajo.
Protección contra los árboles
Si tiene árboles alrededor de la piscina que un día ventoso o tormentoso podrían dañar el cobertor, lo ideal es que mantenga los árboles bien podados siempre que sea posible, asegurándose de que ninguna de sus ramas llegue a acercarse a su piscina.
Puede parecer irrelevante, pero según un estudio realizado en Estados Unidos, las ramas que caen de los árboles son una de las causas más comunes de los agujeros en cubiertas de piscina durante el invierno.
Protección contra los animales
Si alrededor de su zona hay diversas especies de animales salvajes que ven su piscina como un fantástico lugar de relax, lo ideal es que instale una valla alrededor de la zona de la piscina de 2 o 3 metros de alto. Esto mantendrá alejados a la mayoría de animales de cuatro patas.
En cuanto a los pájaros, probablemente no exista aún una solución que funcione al cien por cien, por lo que lo único que puede hacer en este sentido es mantener la cubierta limpia para que no se sientan atraídos por ella.