Hay personas que tienen piscina simplemente para darse un baño refrescante, personas que prefieren practicar la natación y personas que tienen hijos a los que les encanta tirarse al agua, jugar, zambullirse en el agua, etc. La profundidad del agua depende de las actividades que vamos a realizar en la piscina, por lo que, si vas a diseñar y construir tu piscina, te daremos algunas claves para que escojas sabiamente su profundidad.
Aspectos a tener en cuenta
Por lo tanto, a la hora de diseñar una piscina debemos tener en cuenta si es una piscina familiar, si van a bañarse niños, si va a ser una piscina individual, deportiva, etc. En caso de que la piscina sea de uso familiar tendremos que tener en cuenta que van a bañarse personas de diferentes alturas y que van a realizar diferentes actividades en la piscina. Lo recomendable es realizar una piscina con un fondo plano de 1,20 si simplemente nos bañaremos para refrescarnos. Será un lugar adecuado para la altura de los niños y apto para relajarnos o nadar. Por lo que, podríamos decir que esta sería la piscina estándar más simple.
En caso de necesitar un poco más de profundidad podemos construir una piscina con fondo curvo cuya profundidad vaya en aumento a medida que nos vayamos metiendo en la piscina. En este caso tendremos una piscina apta para personas más bajitas, para personas con miedo a la profundidad o para buceadores que se tiran de cabeza al agua. En este caso podremos profundizar la piscina desde un 1,20 hasta un 1,80 y esto depende de nuestra preferencia. Si vamos a poner accesorios a la piscina y vamos a saltar al agua desde un trampolín o una plataforma, obviamente necesitaremos un poco más de fondo.