A la hora de construir nuestra piscina, es importante tener en cuenta varias características y factores, que deben ser comunicados a la empresa constructora. Es importante dejar bien claro aquello que se desea, para que nuestra piscina se adapte a nuestras necesidades. En este post te explicaremos cuáles son estas necesidades y qué puede llegar a constar, orientativamente, una piscina a medida.
Elegir el tipo de piscina
Si lo que preferimos es construir una piscina de obra, debemos tener en cuenta de que el precio será superior a una piscina prefabricada, preinstalada o de PVC. Las piscinas de obra suelen ser más costosas, pero valdrá la pena, ya que suelen ser las que mejores condiciones tienen. El mejor acabado y las que más estética y comodidad aportan, son este tipo de piscinas. Dentro de la categoría de piscinas de obra podemos encontrar varios tipos de piscinas.
- Las piscinas de obra más económicas son aquellas que van revestidas con liner.
- Las piscinas que mejor se pueden adaptar a las necesidades y gustos de las personas son las piscinas de hormigón proyectado, recubiertas con gres porcelánico o gresite.
La excavación
La excavación es el primer paso para construir una piscina de obra. Este paso es determinado por otros factores como la ubicación o el tipo de excavación que realizaremos. Si la excavación se realizará a cielo descubierto, es decir, teniendo acceso libre a la parcela, el presupuesto será medio. Si lo que necesitamos es una grúa más pequeña porque no podemos acceder a la parcela, el coste se verá incrementado.
En caso de necesitar una grúa grande, el presupuesto puede subir más de 2.000€ el precio final, debido a los recursos necesarios. Esto ocurre cuando tenemos que ocupar una calle para meter la grúa, porque dentro de la parcela no cabe. En este caso necesitaremos pedir permiso al ayuntamiento y realizar los trámites oportunos para hacerlo posible.
Si la excavación la haremos a mano porque no se puede meter una máquina debido al tamaño de la parcela, el coste tendrá extras por encima de los 3000€. Aunque este precio variará según la profundidad y el tamaño que necesitamos excavar, de forma orientativa se puede obtener una cifra.
Obviamente todos estos precios son estimaciones aproximadas de lo que se suele cobrar como extra, aunque las condiciones finales y los profesionales variarán estos precios. El skimmer o desbordante también aumenta el precio de la piscina. La coronación puede costar en torno a los 400€. Según el revestimiento que escojamos nos costará más o menos. Entre el gresite y el gres hay una diferencia de unos 1500€*. El tamaño de la piscina es prácticamente determinante en el precio final del revestimiento.