Tener un agua cristalina es la primera prioridad de los propietarios de las piscinas y el sistema de filtrado es fundamental para conseguirlo. El filtro de la piscina hace que el agua circule por sus mecanismos y que las impurezas desaparezcan. Sin embargo, hay varios tipos de sistemas de filtrado que cumplen con diversas funciones y aportan un resultado determinado. ¿Arena, vidrio, cartucho, zeolitas diatomeas…? ¿Cuál es mejor? En este post te lo explicaremos.
¿Cuáles son sus ventajas?
El cristal activo es un material filtrante que tiene un gran poder de limpieza contra las impurezas flotantes del agua de la piscina. Este método de filtración es, además de eficiente, muy respetuoso con el medio ambiente. Esto se debe a que el vidrio que se utiliza para filtrar es proveniente del cristal reciclado, que en primer lugar se trocea y después se muele y criba, consiguiendo, de esa manera, el material filtrante. Después de cribar el vidrio se limpia y se tensioactiva mediante un trabajo químico. Este proceso de fabricación convierte el vidrio en un material muy distinto a la arena para filtrar.
Las características del vidrio filtrante que se consiguen gracias a su fabricación especial, hacen que el filtro tenga una mayor eficacia y atrape las partículas de suciedad más finas. El éxito de este material es mucho mayor que el de los filtros de arena y gracias al mismo se puede conseguir una calidad de agua que se puede observar a simple vista. La superficie lisa del vidrio, al contrario que la arena de cuarzo, tiene una eficacia tan grande que incluso puede atrapar las bacterias del agua, que se quedan pegadas al material filtrante. Por lo tanto, el filtro de vidrio tiene un gran poder desinfectante.
Otra gran ventaja del filtro de vidrio es que este se mantendrá limpio por mucho más tiempo, ya que el lavado a contracorriente que se realiza es mucho más eficaz que los sistemas tradicionales de filtrado. Por lo tanto, el filtro se limpiará y aclarará de forma mucho más sencilla que el filtrado de arena. De esta manera el filtro se mantendrá limpio y no habrá riesgo de que se contamine el agua. En resumen, gracias al filtro de vidrio conseguiremos una calidad de agua mayor, un filtro mucho más higiénico, un uso de productos químicos mucho más eficiente, un lavado a contracorriente mucho mejor y un filtro con una vida útil mucho mayor que otros.